Mostrando entradas con la etiqueta rosquillas tontas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta rosquillas tontas. Mostrar todas las entradas

lunes, 8 de mayo de 2017

Rosquillas de San Isidro (tontas y listas)

El origen de estas ricas rosquillas con aroma de anís, se atribuye a una famosa rosquillera llamada Tía Javiera, al parecer sus rosquillas tenían mucho éxito, lo cual propició que otros vendedores las pusiesen a la venta en sus tenderetes, utilizando como reclamo un falso parentesco con la Tía Javiera.

Al margen de leyendas y anécdotas, lo que es un hecho es que en el mes de mayo en Madrid estas rosquillas adornan los escaparates de todas las pastelerías. Pero no hace falta ir a Madrid para degustarlas, son muy fáciles de hacer, y las podéis preparar en casa sin ningún problema. Si os animáis os dejo la receta a continuación.

Ingredientes:

Para la masa de las rosquillas
-100gr. de aceite de oliva suave
-180gr de azúcar
-3 huevos
-400gr de harina de repostería
-1 sobre de levadura Royal
-1 pizca de sal
-la piel de un limón (solo la parte amarilla, sin nada de pieles blancas)
-50gr de licor de anís
-2 cucharaditas de anís en grano

Para pintar las tontas
-1 yema de huevo

Para el glaseado de las listas
-1 clara de huevo
-1 cucharadita de licor de anís
-1 pizca de sal
-6 gotas de zumo de limón
-250gr de azúcar glass

Preparación:

En primer lugar ponemos una sartén al fuego y echamos el aceite de oliva y la piel de limón bien lavada bajo el grifo para eliminar posibles restos de pesticidas. Cuando la piel del limón empiece a dorarse retiramos del fuego, colamos el aceite y lo reservamos.

Aparte en otra sartén echamos los granos de anís y los tostamos moviéndolos constantemente para que no se quemen. Cuando estén, los echamos en un mortero, los trituramos lo más fino posible, y reservamos también.

Por otro lado empezamos a preparar la masa de las rosquillas, para ello batimos en un cuenco los huevos. Cuando estén espumosos añadimos la mitad del aceite frito (utilizamos para la masa 50 gr., los otros 50gr. los reservamos), el anís en grano triturado, el licor de anís, el azúcar y la sal. Mezclamos bien y luego vamos añadiendo la harina poco a poco. Cuando hayamos añadido un poco de harina, echamos el sobre de levadura, y continuamos añadiendo la harina restante sin dejar de remover. Primero nos podemos ayudar de un batidor de varillas, y ya al final utilizaremos las manos hasta obtener una masa homogénea y manejable. Ya os advierto que queda una masa suave que tiende a pegarse a las manos, y para evitarlo os aconsejo mojarlas en el aceite restante.

Cuando la masa esté preparada, la pasamos a otro cuenco untado con parte del aceite reservado y tapada con papel film y la dejamos reposar en el frigorífico durante una hora aproximadamente.

Finalmente se precalienta el horno a 200º y mientras hacemos las rosquillas tomando pequeñas porciones de masa con las manos untadas en el aceite reservado, formamos una bola con cada una de ellas, las aplastamos un poco, y con los dedos índice y pulgar hacemos un hueco en el centro para darle forma de rosquilla.

A medida que vamos haciendo las rosquillas, las vamos colocando en una bandeja de horno, sobre papel sulfurizado, y cuando estén todas hechas, la mitad de ellas (las tontas) las pincelamos con la yema de huevo. Dejamos reposar unos diez minutos más, y volvemos a pincelarlas de nuevo, luego las horneamos (yo en mi horno en la tercera ranura empezando por abajo) hasta que estén doradas por arriba. En ese momento las retiramos del horno y las dejamos sobre una rejilla para que enfríen. Cuando estén frías las tontas ya estarán listas para guardarlas en una lata donde se guardan en perfecto estado durante días. En cuanto a las listas tenemos que preparar un glaseado para bañarlas en él, pare ello batimos la clara de huevo ligeramente, añadimos la cucharadita de licor de anís, las 6 gotas de zumo de limón y la sal. Mezclamos bien y luego vamos añadiendo el azúcar glas poco a poco sin dejar de remover. Finalmente bañamos la otra mitad de las rosquillas por la parte de arriba en esta glasa, las volvemos a colocar en la rejilla hasta que la glasa esté seca, y ya tenemos las rosquillas listas finalizadas para guardarlas en la lata junto a las tontas.

Estas rosquillas también las podéis preparar en la thermomix, de esta manera os ahorráis bastante trabajo, pare ello los pasos a seguir son los siguientes.

1-El primer paso de calentar el aceite y aromatizarlo con la cáscara de limón, así como tostar los anises os aconsejo hacerlo de la forma tradicional, para ello seguís las instrucciones de los dos primeros párrafos de esta receta.
2-Echamos en el vaso de la thermomix 50 gr de aceite aromatizado, los anises triturados, el licor de anís, el azúcar y los huevos y programamos 15 segundos /velocidad 4
3-Agregamos la sal, la harina y la levadura y programamos 3 minutos /velocidad espiga
4-Retiramos la masa del vaso y la colocamos en un bol engrasado con parte del aceite restante. Tapamos con papel film, y dejamos reposar en el frigorífico durante una hora aproximadamente.
5-A partir de aquí se sigue con el proceso igual que por el método tradicional.

Espero que la receta de hoy os haya gustado, y si os animáis a ponerla en práctica mejor, porque estas tradiciones gastronómicas nunca se deberían perder. Yo pese a no vivir en Madrid hace ya unos años que en el mes de mayo preparo estas rosquillas, y espero seguir haciéndolo muchos años más, porque en el desayuno, con un descafeinado con leche están deliciosas ;)

Como ayer fue el día de la madre, con vuestro permiso, esta receta se la dedico a la mía. Espero poder celebrar muchos días más esta festividad con ella a mi lado y en un estado de salud aceptable. Te quiero mucho mamá!!!