Últimamente he estado ausente
del blog por diferentes motivos, primero porque en la fiesta de San
Juan pasé frío y cogí un resfriado que me tuvo unos días
convaleciente… Afortunadamente eso ya quedó atrás, pero ahora
estamos en obras en casa, concretamente en la cocina, y eso significa
estar siempre moviendo cosas, limpiando polvo, en fin, qué voy a
contaros, supongo que alguna vez la mayoría de vosotros habéis
pasado por algo así y es un caos total... , el caso es que todavía
tardarán en finalizar, porque entre que el albañil, el fontanero,
el carpintero y el de las ventanas hacen su trabajo, calculo que
hasta la segunda semana de agosto no estará la cocina operativa al
cien por cien, y por entonces necesitaré un descansito, así que con
la entrada de hoy me despido de todos vosotros hasta el mes de
septiembre, que prometo volver con energías renovadas y con más
ganas que nunca de cocinar en la nueva cocina :-)
La receta de hoy es súper
sencilla y muy nutritiva, ideal por ejemplo para un desayuno de
verano que no apetecen cosas calientes. La verdad es que yo este smoothie que hoy os presento lo preparé sobre la marcha, sin tener
nada decidido previamente, porque tengo un compañero que lo mandas a
la compra y pese a tomar nota, si le pides tres trozos de bacalao
como hice el otro día (somos tres en casa) llega con dos, si le
pides un litro de leche te trae tres, si le pides que te traiga un
chorizo para hacer unas lentejas trae una docena… Juro que es
cierto, no exagero nada, es un milagro que traiga la cantidad exacta,
casi siempre trae más de lo que se le encarga, salvo alguna vez que
se queda corto como el otro día con el bacalao, pero eso es la
excepción. A parte de errar las cantidades, hace poco le encargué
unas cerezas, y vino con medio kilo de fresas, así que para darle
salida hice este batido cremoso que os presento a continuación,
espero que os guste.
Ingredientes:
-500gr. de fresas
-2 plátanos
-zumo de 1 naranja
-2 cucharadas de fructosa ó
azúcar (opcional)
Preparación:
En primer lugar lavamos bien las
fresas bajo el grifo del agua fría, luego le sacamos el rabito, las
cortamos por la mitad y las echamos en un bol. Los plátanos los
pelamos y los cortamos en rodajas y los echamos también en el bol. Por último exprimos la naranaja y añadimos el zumo al bol. Si os gusta que quede algo dulce como a mí, le añadís dos
cucharadas soperas de fructosa o en su defecto de azúcar, y con la
batidora trituráis todo hasta que quede una mezcla homogénea.
Luego servimos en vasos altos decorados al gusto, introducimos una
pajita, y listo para servir.
Recomendaciones:
Para aprovechar bien todas sus
vitaminas conviene no tardar mucho en consumirlo, por lo que si os
gusta que esté bien fresquito os recomiendo que tengáis la fruta en
la nevera al menos unas horas antes de proceder a su preparación, y
después de prepararlo si no está aun lo suficientemente frío
podéis dejarlo media hora más en el frigorífico.
Nada más por hoy, en septiembre volveré a visitar vuestras cocinas, y a traeros nuevas recetas. Mientras os deseo a todos un feliz verano!!!