Para la entrada
de hoy he elegido una receta típica de
los Carnavales en Galicia, son las denominadas Chulas gallegas, conocidas en
otros lugares con el nombre de Fritos.
Además de por
Carnaval, en la zona en la que vivo, también era típico prepararlas para la
comida campestre que se celebra todos los años el 21 de septiembre, en el
municipio limítrofe de Trazo (A Coruña), con motivo de la festividad de San
Mateo. Aunque últimamente los puestos de venta de pulpo y churrasco han restado
protagonismo a estas comidas que las familias de la zona preparaban la víspera
en casa para luego degustar en el recinto de la ermita el día de la fiesta, lo
cierto es que aun queda gente que las sigue preparando. Por este motivo la receta de hoy me trae muchos
recuerdos de la infancia, y como tal le tengo un cariño especial. Además por
fin he podido calcular las cantidades para que la masa quede con la
consistencia adecuada y las chulas resulten esponjosas y tiernas, pues como
ocurre con muchas recetas que hacían nuestras abuelas, ellas las hacían a ojo,
sin pesar los ingredientes.
Os dejo con la
lista de los mismos y la preparación de la receta, y os animo a que las
preparéis, ya veréis como os encantan y pronto repetís.
Ingredientes:
-120gr. de leche
entera
-2 huevos camperos
-30gr. de azúcar
-180gr. de harina
-1 pizca de sal
-1/2 sobre de
levadura royal
-aceite de oliva
suave para freír
-azúcar para
espolvorear por encima
Preparación:
La preparación es
súper sencilla, tan solo hay que batir los huevos, añadir la leche, el azúcar y
la sal, mezclar todo bien, y luego agregar la harina y la levadura, integrar
todo y dejar reposar durante al menos 30 minutos.
Transcurrido el
tiempo de reposo, ponemos una sartén al fuego con aceite de oliva suave, cuando
esté caliente, con la ayuda de dos cucharas vamos echando en la sartén pequeños
montoncitos de masa.
Cuando estén
dorados por un lado le damos la vuelta para que se hagan por el otro, y luego
los colocamos en una fuente sobre papel absorbente.
Cuando tengamos
todas chulas hechas las espolvoreamos por encima con un poco de azúcar, y
listas para tomar con un cafecito, o un chocolate con leche, por ejemplo.
En días de frío
como los que nos acompañan es cuando
más apetecen estos dulces de sartén.
Y por hoy
termino. Nos vemos en unos días. Mientras que seáis muy felices.
Un beso a tod@s