Por fin retomo la actividad en el blog. Cuando publiqué la anterior entrada no imaginé que tardaría tanto en actualizarlo, pero la gripe primero y la alergia después me dejaron sin fuerzas para nada.
La parte buena es que he sido la única en casa que he estado enferma. Temía que mi madre, que como sabéis los que me seguís padece Alzheimer, pudiera contagiarse pero afortunadamente no ha sido así.
El caso es que por fin estoy recuperada y con más ganas que nunca de mostraros
una selección de recetas que he escogido para las fiestas navideñas, y comienzo
con unas galletas, luego en futuras entradas continuaré con más propuestas.
La tradición de hornear y decorar galletas por Navidad se remonta al siglo XIV
en Suiza, Alemania y Austria. De ahí se fue extendiendo al resto de países
europeos, llegando incluso a América, posiblemente debido a las familias
europeas que emigraron allí.
Si tenéis niños en casa es una receta muy apropiada para preparar con ellos,
seguro que les divierte un montón..., y si las hacéis una tarde lluviosa de
invierno más todavía... No hay mayor placer que hornear estas galletas una
tarde lluviosa de sábado o domingo, al calor del hogar y luego
degustarlas con un cafelito o un chocolate calentito.
En este caso he utilizado unos moldes de Wilton en forma de estrella de
diferentes tamaños, que al ir superpuestos forman un precioso árbol de Navidad.
He elegido una decoración de lo más sencilla porque estaba un poco vaga el día
que las preparé y no me apetecía ponerme a colorear la glasa, esa opción
la dejo para otra ocasión.
Vamos con la receta, ya veréis que fácil es
Ingredientes:
-300gr de harina de repostería
-120gr. de almendra molida
-170gr. de mantequilla a temperatura ambiente
-120gr. de azúcar
-1 huevo
Para la glasa de escritura:
-1 clara de huevo (preferiblemente pasteurizada)
-200gr. de azúcar glass
-5 gotas de vinagre de manzana
-colorante alimentario amarillo en gel
-perlas comestibles (opcional)
Preparación:
Echamos en un bol la harina de trigo, la mantequilla cortada en trozos, el huevo, el azúcar y la harina de almendras, mezclamos hasta formar una bola, luego la cubrimos con papel film, y la dejamos reposar en el frigorífico durante 30 minutos.
Esta masa también la podéis preparar en thermomix, para ello introducís todos
los ingredientes en el vaso y programáis 20 segundos / velocidad 6
Transcurrido el tiempo de reposo precalentamos el horno a 180º y mientras
estiramos la masa, para ello la colocamos entre dos láminas de papel film
o de papel de hornear y con la ayuda de un rodillo la estiramos dejándola
de un grosor de ½ centímetro más ó menos. Luego con los moldes cortamos las
galletas y la ponemos en la bandeja del horno sobre papel de hornear. Las
colocamos en la parte central con calor arriba y abajo y cuando cojan un color
dorado (entre 10 y 15 minutos en mi horno) las retiramos del horno y las
dejamos enfriar sobre una rejilla.
Mientras las galletas enfrían, preparamos la glasa, para ello batimos las
claras ligeramente y luego vamos añadiendo el azúcar glas poco a poco, sin dejar
de batir. Nos quedará una pasta de una consistencia parecida a la pasta de
dientes. Cuando todo el azúcar esté integrado, añadimos las gotas de vinagre,
batimos unos minutos más y ya tenemos la glasa de escritura, también llamada
glasa de delineado, lista.
El paso siguiente consiste en teñir una parte de la glasa para decorar la
estrella que corona el árbol, para ello con ayuda de un palillo cogemos un poco
de colorante amarillo en gel y lo vamos mezclando con la glasa. Es mejor ir
poco a poco hasta obtener la intensidad deseada, utilizando de cada vez un
palillo nuevo para no ensuciar el colorante. Después para aplicar la glasa la
echamos en una manga y empezaremos pegando la boquilla a la
galleta, apretamos un poco, y levantamos hacia arriba formando un ángulo de
unos 45º, presionando siempre de manera suave y constante sobre la manga, y
avanzamos llevando el cordón de glasa en el aire en todo momento, hasta llegar
al final, que de nuevo pegamos la boquilla a la galleta y retiramos. Una vez
hecho el borde de la estrella hay que rellenar el interior, para lo cual
necesitamos una glasa de relleno, es decir un poco más líquida, y la
conseguimos añadiendo un poquito de agua a la glasa de escritura hasta que
tenga una consistencia algo más ligera (no mucho) Iremos gota a gota hasta
adquirir el punto deseado, luego la echamos en un biberón y rellenamos. Con la
ayuda de un palillo la extendemos bien y después colocamos en cada punta de la
estrella una perla comestible. Por último colocamos la galleta sobre una
rejilla y esperamos a que se seque.
Para formar el árbol, el resto de galletas las iremos colocando unas sobre
otras empezando por las de mayor tamaño y terminando por las más pequeñas.
Entre ellas echamos un poco de glasa de relleno en el centro para pegarlas,
y luego arriba de todo colocamos la estrella que habíamos decorado con glasa
amarilla y finalmente en las puntas ponemos unos pequeños montoncitos de
glasa simulando los copos de nieve y para potenciar el efecto nevado
espolvoreamos el conjunto de azúcar glas.
Aquí podéis ver como queda visto desde arriba
Obviamente podéis utilizar los moldes que tengáis por casa, y los colores que deseéis, en tema de decoración de galletas se trata de dejar volar la imaginación.
Si las queréis regalar las colocáis en una bandeja de cartón sobre blonda decorativa, las envolvéis con papel de polipropileno transparente, y con una rafia de color verde y rojo (dos colores muy navideños) y una etiqueta de felicitación tenéis listo un bonito regalo.
Espero que os haya gustado mi propuesta de hoy.
Nos vemos en unos días (toco madera) con un aperitivo riquísimo y fácil de preparar para sorprender a vuestros invitados las próximas fiestas.
Hasta entonces. Que seáis muy felices.