En el plano gastronómico asociamos a Asturias con la fabada, la sidra, el arroz con leche…, y por supuesto con el cachopo. Allí os servirán los más grandes, por lo que pidiendo uno, pueden comer varias personas, pero no hace falta viajar a Asturias para degustar un buen cachopo, pues en casa podemos hacer unos ricos cachopos para la familia, que poniendo cuidado en elegir bien los ingredientes, nada tendrán que envidiarle a los asturianos, salvo el tamaño, muy probablemente, pero eso tampoco es ningún problema, en lugar de hacer uno muy grande, podemos hacer dos más pequeños y asunto resuelto.
La receta de cachopo clásico es la que os traigo hoy, y consiste en dos filetes de ternera, rellenos de jamón curado y queso, y luego rebozados en harina, huevo y pan rallado, y posteriormente fritos en aceite.
Como veis es una receta que no tiene mayor misterio ni complicación, lo importante es la calidad de los ingredientes y por supuesto un acompañamiento adecuado, para lograr un plato completo y exquisito.
Os dejo ya con la lista de
Ingredientes (para 2 personas):
-2 filetes de ternera
-4 lonchas finitas de jamón ibérico
-4 lonchas finitas de queso
-harina y pan rallado para rebozar
-2 huevos
-aceite de oliva virgen extra suave para freír
-pimientos del piquillo asados
-2 dientes de ajo
-ensalada básica de lechuga, tomate y cebolla para acompañar
-2 patatas grandes
-sal
Preparación:
Comenzamos cortando los filetes de ternera por la mitad. A continuación con un mazo de cocina los aplastamos un poco, salamos ligeramente (no conviene pasarse, porque el jamón ya le aporta algo de sal), y luego formamos el cachopo, para ello colocamos una mitad del filete en un plato, encima de este colocamos una loncha de jamón ibérico, a continuación las dos lonchas de queso, después otra loncha de jamón y finalmente la otra mitad del filete de ternera. Hacemos lo mismo con el otro filete de ternera y las restantes lonchas de jamón y queso. Reservamos.
Después colocamos en un plato el pan rallado, en otro la harina, y en otro los dos huevos batidos. Reservamos todo.
Pelamos las patatas, las cortamos en bastoncitos, y reservamos.
En una sartén echamos aceite de oliva hasta cubrir la base, y cuando esté caliente freímos las patatas. Si son muchas para hacerlas todas de una vez, las hacemos en dos tandas. Cuando estén doradas las retiramos a un plato y salamos.
En el mismo aceite donde hemos frito las patatas añadimos unos pimientos del piquillo en conserva y un par de ajos pelados y cortados por la mitad, desechando el germen central. Cuando los ajos empiecen a dorarse los retiramos (ya no los necesitaremos) y sacamos los pimientos a un plato. Reservamos.
Por último rebozamos por ambos lados uno de los cachopos pasándolo por harina, después por huevo batido, y finalmente por pan rallado, y freímos en la sartén, unos 2 ó 3 minutos por cada lado, a fuego medio-bajo. Cuando esté hecho lo pasamos a un plato sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite, y procedemos del mismo modo con el otro cachopo.
Y ya solo nos queda servir a la mesa los cachopos, acompañados de los pimientos, las patatas fritas, y una ensalada de lechuga, tomates y cebolla preparada en el último momento.
Abajo podéis ver una foto del corte. No me digáis que no tiene buena pinta, con el queso fundido en el centro, y ese rebozado tan rico en el exterior.
Pues esto ha sido todo por hoy. Nos vemos pronto con una nueva receta.
Un abrazo.