miércoles, 15 de julio de 2015

Sobre mí

Me llamo Maca Candal Barreiro, vivo en un pueblo del interior de Galicia, y me gusta la cocina desde que tengo uso de razón. De pequeña jugaba más a las cocinitas que con las muñecas.

Aparte de la cocina, me encanta viajar y probar los platos típicos de los lugares que visito, los cuales, luego al regresar del viaje, intento poner en práctica.

Además de la cocina y los viajes, me gusta leer, el contacto con la naturaleza, las reuniones tranquilas en torno a una mesa con familiares y amigos, pero si hay algo por lo que siento debilidad, es por los animales maltratados. La mirada de un perro abandonado me rompe el alma en pedazos y no puedo pasar de largo como si no fuera conmigo.

Ahora inicio esta nueva aventura con el objetivo de ir recopilando mis recetas de cocina, y si por añadidura los que visitáis el blog podéis sacar alguna idea, o probáis a cocinar algunos de mis platos y os gusta el resultado, me sentiría muy satisfecha, porque el blog alcanzaría así su verdadera razón de ser, ya que al fin y al cabo estamos en este mundo para ayudarnos y para aprender unos de otros.

En cuanto al contenido, habrá recetas dulces y saladas, pero tengo claro que solo publicaré aquellas recetas que haya preparado yo personalmente y cuyo resultado me haya gustado lo suficiente como para repetir la experiencia, y que por lo tanto hayan pasado a formar parte de mi recetario.

El blog se llama "rosquillas y roscones" y la razón de este título es porque me gustan mucho las rosquillas artesanales que venden en las romerías y en las ferias por los pueblos de Galicia; y también me gustan muchos los roscones, de hecho mi postre favorito es el roscón de reyes.

Por último comentar que dedico este blog a las dos personas que más quiero, mi padre y mi madre.

Mi padre falleció en el año 2001, víctima de una leucemia, y mi adorada madre, falleció en enero de este 2021 después de una penosa enfermedad que borró todos sus recuerdos. 

Ahora los dos están juntos de nuevo después de 20 años separados, y yo vivo con la esperanza de algún día reunirme con ellos, para no separarnos nunca más. Ese deseo es lo que me da fuerzas y lo que da sentido a mi vida actualmente, eso y la inestimable compañía de mi marido, al que quiero tanto que no me imagino la vida sin él.


A mis padres les debo todo lo que tengo y todo lo que soy. Gracias por todo, papa y mamá. Os llevo siempre en mi corazón.

En cuanto a ti, querido lector, te doy las gracias por la visita, y estaré encantada y agradecida de que regreses cuántas veces desees.